Capítulo 9

Este me ha salido muy largoo xDDD Disfrutadlo xD

Capítulo 9

Larry salió del ascensor corriendo y salió por la puerta este del sótano 3. Entonces, encontró otro ascensor, éste para ir a la superficie directamente. Entró, lo activó y esperó a que subiese. El ascensor subía lentamente...
-Venga, ¡rápido, rápido!
Las puertas del ascensor se abrieron, y Larry se encontró en la zona más al norte de Ibérica Este, justo antes de entrar en Ibérica Norte, y vio el edificio del generador al final de la calle. Observó con asombro que no parecía haber basura alguna en esa calle. Cuando se acercó al edificio, vio que algunas ventanas estaban rotas y que la cerradura electrónica de la puerta estaba forzada. Miró alrededor y observó que por esa calle, no parecía haber nadie, aunque hubieran casas. Tal vez hubieran escuchado tiros y se habrían ido a sus casas. Preparó el rifle antes de entrar al edificio, y abrió de una patada la puerta.
-Vaya, esto es como cuando estaba en el Comando Delta. Emoción, aventuras, buenas chicas, buenas armas y un buen sueldo. ¿Qué más podría pedir?-pensó él.
Entró rápidamente, dio una voltereta por el suelo y apuntó con el rifle. Se dio cuenta de que estaba haciendo el idiota, porque eso simplemente era el vestíbulo de entrada, que no era más que una pequeña sala con unas máquinas que no parecían importantes. Así que pasó corriendo y se preparó con el rifle, le pegó una patada a la siguiente puerta y entró. Era una sala gigantesca, y cerca del techo habían muchas pasarelas cogidas al techo, que permitían andar por ellas para acortar camino en el piso superior de metal.
-Parece una fábrica... ¿Dónde está el generador?
Entonces lo vio, un cilindro de metal en el centro de la sala, conectado a un montón de cables. Tenía varios paneles de cristal cubriendo su perímetro, para que nadie lo tocase. Larry se acercó, y vio que había una consola de control ahí mismo, en la cual había una palanca en la que ponía en sus lados, “On” y “Off”. La palanca estaba en el Off y Larry exclamó:
-¿Qué? ¡Un generador potentísimo, con esta mierda de protección! ¡Una palanca! ¡Solo una palanca!
Larry le dio a la palanca, y se oyó un chasquido. De pronto, surgieron varios cilindros más pequeños rodeando a los paneles de cristal que protegían al cilindro. De esos cilindros, surgieron varios agujeros, de los cuales salieron unos rayos rojos que Larry identificó como lásers.
-Vaya, así que si que había protección. ¡Augh!
El interior de Larry se revolvió, provocándole un profundo vértigo. Se sujetó a la consola, y desactivó el generador. Se oyó otro chasquido, y las defensas bajaron. La sensación desapareció de golpe, y se puso en pie:
-¿Por qué no debo conectar el generador? Vaya, esto parece estar desértico. Aquí no hay nadie.
De pronto, se oyó una explosión en el piso de arriba. Trozos de hormigón cayeron, y Larry se apartó de la zona donde cayeron. Una de las paredes del piso superior había reventado, y Alexia surgió de la explosión, y cayó en una de las pasarelas. Larry gritó:
-¡Alexia!
Ella ni le oyó, y saltó a otra pasarela con su rifle. Iba con una coraza similar a la de Larry, pero adaptada a sus formas femeninas. Empezó a disparar hacia el agujero que había hecho la explosión, y se oyeron ruidos de balas estrellándose contra un escudo. Larry volvió a gritar:
-¡Alexia!
Y ella le oyó y miró hacia abajo. Ese fue su error. Una onda surcó el aire y le golpeó en el pecho. Ella perdió el equilibrio y cayó de la pasarela, golpeando su espalda contra la parte superior del generador, apagado ahora, y resbaló hacia el vacío. Larry fue corriendo a por ella, que seguía cayendo.
-¡Alexiaaaaaa!
Y miró hacia arriba. No iba a llegar a cogerla a tiempo. Tiempo, esa idea resonó en su cabeza. Y de pronto, todo se paralizó. Larry continuó corriendo, y se dio cuenta de que el cuerpo de Alexia estaba suspendido en el aire, sin moverse. Él se paró asombrado, y vio que hasta las llamas de la explosión estaban paradas.
-Vale, esto es muy raro.
Y de pronto, el cuerpo de Alexia empezó a descender muy lentamente, y pareció que todo reanudaba su curso, pero muy despacio al principio. Larry se colocó debajo del cuerpo de Alexia, que empezó a coger velocidad, y cayó en sus brazos. La llevó a un rincón, debajo de unas escaleras que subían al piso superior, y le susurró suavemente:
-Alexia, despierta.
Ella abrió los ojos muy despacio y dijo:
-¿Eres tú, Larry?
-Soy yo. ¿Qué ha pasado?
-Los basureros no son simples basureros. Se mueven como profesionales, algunos, al menos. ¿Al final hubo problemas con tu bioescáner?
-No, no hubo ninguno. ¿Dónde está Kapón?
Ella apoyó su cabeza en un trozo de hormigón y le dijo:
-Sigue arriba. Tendrías que verlo, no parece humano.
-¿Tienes heridas?
Ella se giró, y abrió el cierre de la coraza, debajo tenía una herida con un aspecto no muy bueno, sangrando.
-Dios, estás muy herida. Vas a desangrarte. Te llevaré a Blacksteel-dijo él.
Ella sonrió y le dijo:
-Puedo aguantar. Salva a Kapón. Ah, y te quiero, Larry.
Se alzó un poco, y le besó en los labios suavemente. Después, apoyó la cabeza en el trozo de hormigón, y cerró los ojos.
-Se ha desmayado-dijo Larry- ¿Me quiere?
Entrecerró los ojos y se puso a pensar. De repente, se dio cuenta de que tenía que ir a por Kapón, por muy mal que le cayese, tenía
que salvarlo, era su compañero y subordinado. Miró el lateral de la coraza de Alexia, y vio que llevaba una radio. Se la cogió, y la encendió:
-¿Kapón? ¿Kapón? ¿Estás ahí?
Se oyó un chisporroteo de la radio, y se puso muy caliente. Larry la soltó, y explotó en el suelo.
-Me parece que no hay manera de comunicarse con él.
Salió corriendo por las escaleras hacia el piso superior, cuando los vio delante de él. Los basureros. Había dos e iban protegidos con una armadura verde oscuro y un casco a juego. Llevaban unos rifles que Larry reconoció como un rifle de ondas. En cuanto lo vieron, se pusieron en posición de ataque, pero Larry fue más rápido, y apuntó con el dedo a uno de ellos, que de pronto, cayó inconsciente. El otro le vio caer al suelo, y Larry aprovechó ese momento para acribillarle con el rifle. La armadura parecía muy resistente, pero las balas estaban reforzadas, y después de unos tiros, el basurero cayó al suelo muerto. Larry se agachó junto al que había dejado K.O. , y le quitó el casco. Vio que era un humano de pelo castaño, y se fijo que parecía tener algo por la nuca, así que lo giró y retrocedió al ver que no era humano, era un androide. Tenía un agujero en la nuca, donde se le podía ver el interior metálico. Él se fijó en que el androide parecía desactivado.
-Parece que la descarga le ha dejado chamuscado el cerebro o lo que sea que tengan. De todos modos, esto es avanzadísimo... La investigación sobre los robots y androides se paró hace un siglo, sin resultados de como hacer un androide realmente bueno. Ninguno podría moverse como se mueven estos. Bueno, ¿el otro es humano?
Le quitó el casco al otro, y vio que éste si era humano. O lo parecía. Le rajó la piel con una navaja que tenía el basurero en el cinto, y vio que salía sangre de verdad, y que tenía músculos de verdad, humanos.
Otra explosión resonó por todo el edificio. Larry miró hacia donde había surgido la explosión, que era en la zona superior, hecha solo de pasarelas de metal. De pronto, empezaron a caer trozos de
hormigón de arriba, que golpearon algunas de las pasarelas de metal, que empezaron a balancearse. Larry buscó las escaleras para subir, que estaban al otro lado de las pasarelas de metal que estaban balanceándose. Larry tragó saliva, y empezó a correr por las pasarelas. Por una de las pasarelas de arriba se asomaron dos basureros con rifles que le apuntaron y empezaron a dispararle. Las
pasarelas comenzaron a balancearse más, y algunos de los soportes que las sujetaban a las de arriba se rompieron. Una de las pasarelas se rompió y cayó al piso inferior quedando pulverizada. Larry cogió carrerilla y saltó por encima del hueco que había dejado. Cuando cayó en la otra pasarela, uno de los soportes cedió y la pasarela se quedó en vertical. Larry se cogió a las barandillas y empezó a trepar. Los basureros del piso de arriba no parecían tener ganas de que él subiera, así que sacaron los rifles y le apuntaron. Sin preocuparse, Larry apuntó con el dedo a uno de ellos, y se oyó un chirrido que indicaba que la batería estaba recargándose todavía.
-Mierda, y dejé mi mochila propulsora en Blacksteel. Nunca la tengo cuando hace falta.
Se dio un impulso y subió el último tramo justo cuando los basureros disparaban, haciendo caer la pasarela. Larry corrió hasta el final de las pasarelas, y subió al piso de arriba. Cuando sacó el rifle para disparar, una sombra se lanzó encima de los basureros y empezó a golpearlos con un rifle usado como bate de béisbol. Los basureros cayeron al piso inferior, cargándose varias pasarelas en el camino. La sombra se acercó, y se reveló como Kapón, que sonreía maliciosamente.
-Parece que has llegado. Te has perdido casi toda la fiesta.
Larry sonrió y preguntó:
-¿Queda alguno?
-Solo me falta por revisar el piso de más arriba, pero las escaleras las han bloqueado con un campo de fuerza portátil.
-Llevo un rifle que pasa a través de los escudos. ¿Sirve?
-No es un escudo, es un campo de fuerza. Es básicamente lo mismo, pero no sé porque, este campo de fuerza es muy diferente a los otros que he visto. No servirá.
-Vaya. ¿Hay alguna otra manera de subir?
Kapón señaló al techo, donde había un boquete.
-Está ese agujero, pero no podrás subir, y allí necesitaré ayuda.
Larry se sentó en la pasarela de metal, y empezó a pensar. Kapón hizo lo mismo.
-Por cierto, ¿has visto a Alexia?-preguntó Kapón.
-Está muy herida. Está en el piso de más abajo. Está inconsciente y tiene una herida sangrando. No sangra mucho, pero hay que hacerlo rápido.
-De acuerdo, ¿qué equipo llevas?
-Esta coraza, el rifle, un dispositivo de Brainstorm que deja inconsciente a un humano, y fríe a los androides y una pistola congeladora Yaata.
-Ah, te has fijado en que hay androides. Es sorprendente, pensaba que se había dejado de trabajar en ellos.
-Yo también.
De pronto, Kapón sonrió y dijo:
-Tengo una idea.

Posted by Rodolfo | en 14:43

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